Call of Duty ha prosperado durante más de veinte años, evolucionando de combates intensos y realistas a un caos frenético y centrado en el movimiento. Sin embargo, su apasionada base de fans sigue profundamente dividida ante este cambio.
En colaboración con nuestros socios de Eneba, nos adentramos en este debate. Los jugadores veteranos abogan por un retorno a los orígenes de la saga: mapas icónicos, tiroteos directos y sin florituras llamativas. Mientras, los nuevos fans disfrutan del ritmo acelerado, los vibrantes diseños de operadores y la amplia personalización. Entonces, ¿debería Call of Duty volver a sus raíces o está justo donde debe estar?
Clasicismo vs. Estilo moderno
Los fans de largo recorrido suelen citar Modern Warfare 2 (2009) y Black Ops 2 como la cumbre de la saga. Esos juegos priorizaban la habilidad pura: combates limpios, mapas equilibrados y sin habilidades o cosméticos extravagantes.
El Call of Duty actual, en cambio, presenta operadores deslumbrantes con equipos brillantes, corriendo y saltando con armas futuristas. Te guste o lo detestes, la personalización es un elemento fijo. ¿Quieres destacar? Puedes conseguir llamativos skins de COD en Eneba para dominar con estilo.
Para los jugadores veteranos, no obstante, la saga parece haberse alejado de su esencia como shooter militar. Anhelan un retorno a combates tácticos y realistas, no a un campo de batalla teñido de neón con skins inspirados en anime y rifles de ciencia ficción.
Caos a alta velocidad: ¿Emocionante o abrumador?

En 2025, Call of Duty es veloz como un rayo: parpadeas y estás fuera. Mecánicas de movimiento avanzadas como el slide-canceling, el dolphin diving y la recarga rápida dominan el gameplay.
Los jugadores más recientes celebran esta adrenalina, pero los originales argumentan que se sacrifica la estrategia por reflejos instantáneos. ¿Su mayor queja? El juego se siente menos como guerra y más como un shooter arcade disfrazado de militar.
La era del posicionamiento calculado y el juego táctico ha quedado atrás. Sin dominar el movimiento rápido y las subfusiles, sueles estar en desventaja.
Personalización: ¿Libertad o exceso?
En el pasado, elegías un soldado, le ponías un camuflaje y saltabas a la batalla. Ahora, podrías jugar como una estrella pop, un guerrero cibernético o un superhéroe.
Mientras algunos jugadores adoran la diversidad, otros creen que erosiona la esencia militar del juego. Cuando un shooter parece una fiesta de disfraces, no sorprende que los tradicionalistas se sientan alienados.
Aún así, la personalización mantiene la frescura, ofreciendo autoexpresión a los jugadores, y algunos skins son innegablemente impresionantes.
¿Pueden coexistir tradición e innovación?
¿Hacia dónde va Call of Duty? ¿Debería despojarse del brillo para un revival nostálgico o sumergirse plenamente en su evolución hipercinética?
Quizá la solución esté en el equilibrio. Un "Modo Clásico" dedicado, sin movimientos extravagantes ni cosméticos llamativos, podría contentar a los puristas mientras el juego principal satisface los gustos modernos.
Call of Duty brilla cuando honra su legado mientras empuja fronteras. Mapas remasterizados ocasionales y modos simplificados ofrecen esperanza a los tradicionalistas.
Ya sea que valores el estilo clásico o prosperes en el caos actual, algo es claro: Call of Duty no va a frenar. Así que abraza la evolución con estilo —consigue skins impactantes y paquetes de operadores en plataformas como Eneba para destacar en cada era de la franquicia.